¿Los conoces?
Existen varios tipos de cubrebocas o mascarillas, cada uno diseñado con características específicas para diferentes situaciones. Estos son los más comunes:
- Cubrebocas quirúrgicos:
- Son desechables y están hechos de material de varias capas.
- Se ajustan alrededor de la boca y la nariz.
- Son comúnmente utilizados en entornos médicos.
- Mascarillas de tela:
- Pueden estar hechas de algodón u otros materiales textiles.
- Son reutilizables y lavables.
- Ofrecen una barrera básica y son comunes para uso diario.
- N95 y equivalentes:
- Son mascarillas de alta eficiencia de filtrado.
- Diseñadas para filtrar partículas pequeñas, incluidos virus.
- Ajuste hermético para garantizar una protección efectiva.
- Cubrebocas KN95:
- Similar al N95, sigue estándares chinos.
- Proporciona una alta eficiencia de filtrado.
- Cubrebocas con válvula:
- Tienen una válvula de exhalación que facilita la respiración.
- Son eficaces para proteger al usuario, pero no previenen la propagación del virus si el usuario está infectado.
- Cubrebocas de tela con filtro:
- Son cubrebocas de tela que incluyen un espacio para insertar un filtro.
- Proporcionan una capa adicional de protección.
- Cubrebocas de neopreno:
- Fabricados con neopreno, un material resistente al agua.
- Son duraderos y a menudo se utilizan en deportes al aire libre.
- Cubrebocas antipolvo:
- Diseñados para proteger contra partículas sólidas y polvo en entornos industriales.
- Cubrebocas de moda:
- Diseñados con estilo y a menudo hechos de materiales más elegantes.
- No todos cumplen con los estándares de protección necesarios.
- Cubrebocas transparentes:
- Tienen una sección transparente para permitir ver la boca del usuario.
- Útiles para personas con discapacidades auditivas o para situaciones donde la comunicación facial es importante.